Reciclando no sólo conseguimos cuidar el planeta, ahorrando materias primas, agua y energía, sino que además estamos haciendo posible que el empleo verde siga creciendo e impulsando un nuevo modelo económico más sostenible.
La agricultura ecológica, la gestión de residuos y la movilidad sostenible, entre otros conceptos, que hasta hace poco eran desconocidos para la mayoría, están cada vez más presentes en nuestra vida cotidiana. Estos están relacionados directamente con lo que se conoce como la "economía verde", un nuevo enfoque económico y social que busca mejorar el bienestar de la sociedad, combatir la escasez y reducir las amenazas al medio ambiente. Esto ha llevado a que gobiernos, empresas e individuos adopten un nuevo estilo de vida comprometido con la sostenibilidad.
La eficiencia en el uso de los recursos se ha convertido en una necesidad urgente para frenar la extracción excesiva de materias primas, la producción masiva y la acumulación de residuos. Si no hacemos este cambio, las consecuencias para el planeta serán irreversibles. Como ejemplo, en agosto de 2020, a pesar de la pandemia y el confinamiento, ya habíamos consumido todos los recursos que la Tierra puede generar en un año. Esto significa que vivimos durante cuatro meses a expensas de las generaciones futuras, según Pedro Antonio Martín, director de Ilunion Reciclados.
Es el momento de cambiar nuestro modelo productivo y adoptar la economía circular, un enfoque que no solo transformará nuestros patrones de consumo, sino que también creará nuevas oportunidades de negocio y, por lo tanto, nuevos empleos.
En diversas áreas, como hidrología, educación ambiental, arquitectura paisajista, análisis del cambio climático, meteorología relacionada con la agricultura y ecoturismo, entre muchas otras, se esperan cientos de miles de nuevos empleos relacionados con el "empleo verde" en los próximos años. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la transición hacia una economía verde podría generar 60 millones de empleos en los próximos 15 años. Estos empleos estarán relacionados con la agricultura, la fabricación, la investigación y desarrollo, la administración y los servicios, y contribuirán significativamente a preservar o restaurar la calidad ambiental, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
SI RECICLAS, CREAS EMPLEO
Cada vez que separas tus residuos en los contenedores adecuados, no solo estás reduciendo las emisiones de dióxido de carbono (CO2), sino también estás contribuyendo a dar una segunda vida a los desechos en lugar de que terminen acumulándose en vertederos. Además, estás fomentando el ahorro de materias primas y protegiendo la biodiversidad. Sin embargo, más allá de los beneficios para el medio ambiente, es importante entender que al depositar los envases en los lugares correctos, comprar ropa de segunda mano o compartir coche, todas estas acciones están vinculadas a la economía circular y también generan empleo.
En compañías como Saema, que cuenta con el respaldo de la Fundación Repsol, por cada 1.000 kilogramos de envases que se reciclan diariamente, se crean ocho puestos de trabajo para personas con discapacidad y en situación de riesgo de exclusión social. Este Centro Especial de Empleo se dedica a actividades medioambientales en Cantabria y se encarga de recuperar y reciclar envases provenientes del contenedor amarillo gracias al esfuerzo de sus 115 empleados, de los cuales un 78% tienen alguna discapacidad.
Según un informe de la Fundación COTEC para la Innovación, la consecución de los nuevos objetivos en materia de residuos permitirá crear 580.000 nuevos puestos de trabajo sostenibles en la Unión Europea, 52.000 de ellos en España.
En el sector del reciclaje, se necesitan trabajadores de diferentes perfiles profesionales, como operarios de planta, técnicos de calidad, ingenieros, comerciales y administrativos. También hay oportunidades para personas con discapacidad y en situación de riesgo de exclusión social.
MÁS OPORTUNIDADES LABORALES EN EL MEDIO RURAL
En las grandes ciudades, encontrar empleo puede ser complicado, y la situación en los pueblos se complica aún más debido a la infraestructura limitada, la falta de comunicación y el desarrollo empresarial reducido.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de su programa "Empleaverde", destaca el gran potencial del medio rural en la generación de empleo relacionado con la sostenibilidad y nuevas actividades económicas. Esto se logra mediante el desarrollo de ideas de negocios vinculadas a la transformación de sectores tradicionales del medio rural, la oferta de productos y servicios sostenibles demandados por la sociedad y la aplicación de nuevas tecnologías.
El reciclaje es una actividad que se puede desarrollar en cualquier parte del territorio, por lo que ofrece oportunidades laborales en el medio rural. En España, el 60% de las plantas de tratamiento de residuos se encuentran en zonas rurales.
Este enfoque también puede ofrecer oportunidades laborales para personas con discapacidad. Un ejemplo de esto se encuentra en las iniciativas llevadas a cabo por la Fundación Repsol e Ilunion, a través de proyectos como Recycling4all, una empresa especializada en el reciclaje industrial de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE). Cuentan con plantas en áreas rurales como La Bañeza (León) y Campo Real (Madrid), donde trabajan 166 empleados, de los cuales más del 60% son personas con discapacidad. En España, el reciclaje de envases ha crecido un 12% en los últimos cinco años. En 2023, se reciclaron 10,2 millones de toneladas de envases, lo que representa el 84,5% del total de envases puestos en el mercado.
Empresas como Recycling4all y Saema generan un impacto positivo en tres dimensiones: medioambiental, social y económica. Con el respaldo de la Fundación Repsol a través de su programa de inversión de impacto, estas compañías continúan creciendo bajo un modelo que crea empleos y ofrece oportunidades para que muchas personas con discapacidad tengan una vida plena, según lo afirmado por Tomás Castillo.
La economía circular se plantea como una solución a los desafíos medioambientales mientras crea oportunidades de negocio. Según la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, este enfoque permite estimular el crecimiento económico y generar empleo sin dañar el medio ambiente. Muchas empresas ya están adoptando la circularidad en sus procesos productivos, y el desafío actual es incorporar a trabajadores capaces de desempeñar nuevas funciones y actualizar puestos de trabajo tradicionales, centrándose en la sostenibilidad.