Descubre la sólida contribución de las pequeñas y medianas empresas a la economía de España, representando el 95% del entramado empresarial. Exploramos su clasificación según la Unión Europea, el surgimiento del middle-market, y la distribución por sectores.
Las pequeñas y medianas empresas han sido el sostén de la economía española durante un período prolongado, principalmente porque constituyen el 95% del entramado empresarial. La Unión Europea define a una empresa como una PYME si tiene menos de 250 empleados y un volumen de negocios inferior a 50 millones de euros, o si su balance anual no supera los 43 millones de euros.
Dentro de esta categorización, las PYMEs se subdividen en microempresas (menos de 10 empleados), pequeñas empresas (menos de 50 empleados) y medianas empresas (menos de 250 empleados). Recientemente, en España ha surgido la corriente del "middle-market" o Empresas de Tamaño Intermedio (ETIs), que engloba a aquellas compañías con facturaciones entre 50 y 500 millones de euros, situándose entre las PYMEs y las grandes empresas.
Antes de la pandemia, las PYMEs representaban el 97% de las empresas en España, siendo las microempresas el 94% de las empresas del sector privado en enero de 2020. Aunque actualmente hay alrededor de 2.928.000 PYMEs en España, constituyen casi la totalidad del panorama empresarial, con apenas un 0,19% reservado para las grandes empresas.
Por sectores, el sector de servicios sigue siendo predominante, abarcando el 73% del total de las sociedades. Le sigue de lejos el sector de la construcción con un 11%, el sector agrario con un 9% y el sector industrial con un 6%.
En relación con el empleo empresarial, en marzo de 2023, se distribuye de la siguiente manera: microempresas (1-9 empleados) con 1.132.652 asalariados, pequeñas empresas (10-49 empleados) con 168.327 asalariados y medianas empresas (50-249 empleados) con 27.477 asalariados.
En cuanto al desafío de la internacionalización para la recuperación económica, se destaca la importancia de que las PYMEs miren hacia el exterior. Aunque puede presentar dificultades, la exportación se considera una palanca potente para generar ventas, construir nuevas relaciones y diversificar, haciéndolas más resilientes.
Además, se aborda la oportunidad de la "economía circular", un modelo que implica compartir, reutilizar, reparar, renovar o reciclar materiales y productos para crear un valor añadido. Según un informe de la Cámara de Comercio de España y MAPFRE, la economía circular podría generar hasta 160.000 puestos de trabajo en España antes de 2030. El 80% de las PYMEs españolas están comprometidas en este ámbito, lo cual es crucial para reducir costos e impacto ambiental, según el PERTE de economía circular aprobado en marzo.